El gobierno panista de Yucatán encabezado por el gobernador Mauricio Vila, reprimió violentamente con gas pimiento a miles de yucatecos que protestaban pacíficamente en contra del alza de impuestos y del alto costo de emplacamiento, lo anterior durante su primer informe de gobierno en las que estuvieron otros gobernadores panistas así como su dirgente nacional Marko Cortes, quien hasta el momento se ha mantenido callado.